La hidratación se refiere al proceso mediante el cual el cuerpo mantiene un equilibrio adecuado de líquidos, agua y electrolitos (minerales esenciales como sodio, potasio, magnesio, calcio) necesarios para sus funciones biológicas. Aunque beber agua es esencial para reponer líquidos, no siempre es suficiente para mantener una correcta hidratación, especialmente en situaciones donde se pierden minerales junto con el agua, como durante la sudoración intensa, la actividad física, o algunas enfermedades.

Explicación científica

El cuerpo humano está compuesto por un 60-70% de agua, distribuida principalmente en dos compartimentos: intracelular (dentro de las células) y extracelular (fuera de las células, incluyendo sangre y fluidos intersticiales). Para que las funciones celulares se mantengan estables, debe haber un equilibrio entre estos compartimentos, lo cual se logra mediante la adecuada presencia de agua y electrolitos.

1. Agua y equilibrio de líquidos:

• El agua es esencial para el transporte de nutrientes, la regulación de la temperatura, la eliminación de desechos y la lubricación de articulaciones y tejidos.
• Sin embargo, el agua sola no contiene los electrolitos necesarios para equilibrar los niveles de fluidos entre el espacio intracelular y extracelular. Cuando solo se ingiere agua, puede haber una dilución de electrolitos en el cuerpo, lo que puede causar problemas como hiponatremia (bajo sodio en sangre).

2. Electrolitos y funciones corporales:

Los electrolitos son minerales cargados eléctricamente que juegan un papel fundamental en varios procesos biológicos:

• Sodio y potasio regulan el balance de fluidos y la transmisión de señales nerviosas.
• Magnesio es crucial para la función muscular y la síntesis de proteínas.
• Calcio es fundamental para la contracción muscular y la coagulación de la sangre.

Cuando se suda o se pierde líquido por otras razones (vómitos, diarrea, etc.), el cuerpo no solo pierde agua, sino también electrolitos. La reposición de agua sola en estas situaciones puede causar un desbalance de electrolitos, afectando la homeostasis corporal.

3. Hidratación efectiva:

Para una hidratación óptima, el cuerpo necesita una combinación de agua y electrolitos para reponer tanto el volumen de líquidos como los minerales perdidos. Las bebidas con electrolitos, como las soluciones de rehidratación oral o bebidas isotónicas, contienen una mezcla equilibrada de sodio, potasio y otros minerales que:

• Facilitan la retención de líquidos en los tejidos.
• Mantienen el equilibrio osmótico, es decir, el balance entre los líquidos dentro y fuera de las células.
• Apoyan la transmisión de señales eléctricas necesarias para el correcto funcionamiento del sistema nervioso y muscular.
• Pero realmente lo correcto y adecuado para una verdadera hidratación es preparar en un litro de agua, media cucharadita (de café) con sal marina sin refinar y una pizca de bicarbonato, al ir bebiendo reaccionará promoviendo un equilibrio adecuado de la homeostasis e hidrólisis intro y extra celular, provocando de está manera más energía, rápida recuperación y mejora la parte cognitiva.

Conclusión:

Tomar agua con electrolitos es esencial para asegurar una hidratación completa, especialmente en condiciones de pérdida de líquidos significativas. El agua sin electrolitos puede ayudar a reponer el volumen de líquidos, pero no necesariamente restaurará el equilibrio de minerales, que es crucial para funciones vitales como la transmisión nerviosa, la función muscular y el equilibrio osmótico en las células.

¡No olvides beber agua regularmente con electrolitos y mantener tu cuerpo hidratado para disfrutar de todos estos beneficios!